Aunque no es una cirugía plástica, el rejuvenecimiento vaginal es un procedimiento médico y como tal, requiere una cita de valoración con el fin de conocer los antecedentes médicos, historia clínica y escuchar las necesidades y expectativas de cada paciente. De esta manera, el especialista podrá dar un diagnóstico y personalizar el procedimiento de acuerdo con las necesidades del paciente, cuidando su seguridad y satisfacción.