¿Te gustaría eliminar algunas líneas de expresión o remover algunos “gorditos” del cuerpo sin tener que hacerte una cirugía?  

Si buscas un tratamiento no invasivo, que te haga lucir una piel de diez de forma inmediata y que te aporte beneficios a futuro, sigue leyendo, porque hoy te voy a hablar de todo lo que se puede lograr con un tratamiento de radiofrecuencia.  

La radiofrecuencia es utilizada por la medicina cosmetológica, para eliminar o corregir alteraciones corporales y faciales a través del calor. Su aplicación no es dolorosa, es agradable, sus precios no son inalcanzables y puedes ver resultados en muy poco tiempo. 

¿Qué es la Radiofrecuencia? 

La Radiofrecuencia es un tratamiento estético no invasivo, utiliza aparatología para emitir ondas electromagnéticas de alta frecuencia sobre la piel y aumentar un aumento de temperatura (controlado) en sus diferentes capas para estimular la producción de colágeno, combatir la flacidez cutánea de la piel, mejorar su apariencia y textura de manera natural y progresiva.  

Se puede aplicar en el rostro y en el cuerpo.  
 

Beneficios de la radiofrecuencia:  

• Mejora la circulación de la piel y el tejido subcutáneo. 
• Combate la celulitis.  
• Ayuda a eliminar la grasa localizada y la flacidez.  
• Define la figura, reafirma y también es eficaz para reducir las estrías.  
• Favorece el drenaje linfático natural del cuerpo, eliminando más rápidamente líquidos y toxinas (causantes de la celulitis). 

• Favorece la formación de colágeno y elastina en las capas internas, reestructurando el tejido subcutáneo y dotándolo de firmeza. 

Radiofrecuencia Facial  

Además de a nivel facial (en cara, cuello, escote) 

Radiofrecuencia Corporal 

Permite obtener los beneficios como la reducción de la flacidez, el drenaje linfático, reanimación y estimulación de la circulación sanguínea. 

Glúteos: ayuda a levantar el tejido, aumenta la tonicidad, redondea la zona y otorga la firmeza perdida. 

Piernas: mejora la firmeza de la parte de los músculos anteriores y posteriores, además, combate la celulitis en esta zona.   

Abdomen: La radiofrecuencia en la zona abdominal ayuda a eliminar flacidez causada por el aumento de peso, mejora la turgencia de la piel con estrías y elimina cúmulos de adiposidad en esa zona. 

Brazos: el tratamiento con Radiofrecuencia es efectivo para casos de descolgamiento del tejido en la cara interna del brazo, así como para eliminar la adiposidad localizada en esta zona del cuerpo. 

Papada y cuello: la radiofrecuencia tensa la piel de esta zona que por el paso del tiempo presenta una notable pérdida de turgencia. Así, elimina tejido adiposo acumulado. 

Rostro: el tratamiento con radiofrecuencia tiene diversos usos en la zona del rostro, como definir el óvalo facial, eliminar arrugas, mejorar el tono de la piel, suavizar el surco naso geniano, eliminar ojeras y bolsas, rejuvenecer la piel, entre otras. 

Senos: afirma el tejido y devuelve la turgencia pérdida por el paso del tiempo, amamantamiento, descenso de peso, etc. 

Piel estriada: la aplicación de diversos tipos de radiofrecuencia es efectiva (en diferentes porcentajes) en el tratamiento de estrías, ya sean rojas o blancas. Ayuda en la generación de nuevas fibras de colágeno y elastina en las estrías recientes, haciendo que desaparezcan o se reduzcan considerablemente. 

En el caso de las estrías blancas, mejora notablemente la tonicidad de la piel que ha quedado laxa a consecuencia de los desgarros. 

Radiofrecuencia para Celulitis 

El tratamiento contra la celulitis implica el uso de radiofrecuencia, ya que ayuda a mejorar mucho la piel, uniformando, desinflamando y dejándola con apariencia más pareja. 

La aplicación de radiofrecuencia en una zona con celulitis tiene por objetivo conseguir: 

•  Minimizar el tejido graso existente. 
•  Modelar el contorno. 

• Tensar la piel reduciendo la flacidez. 
•  Incitar el drenaje de la linfa para que la zona quede libre de toxinas, líquidos acumulados y desechos metabólicos. 

Los efectos se ven de forma progresiva, pero desde la primera sesión la piel se nota mucho mejor y más firme. 

¿Cómo se hace un tratamiento con radiofrecuencia? 

Es un tratamiento indoloro y, gracias al masaje y al calor que se produce en la piel, el paciente experimenta una sensación agradable y relajante. Además, esta técnica no requiere ninguna recuperación posterior y tras su aplicación la incorporación a la vida normal es inmediata. 

Antes de comenzar con la sesión, el especialista delimita la zona de trabajo con un rotulador y aplica el producto que hará de conductor de la energía. Seguidamente, pasa el cabezal del equipo de forma vertical al tejido, moviéndolo de forma constante. 

Una vez concluida la sesión, la persona puede volver a su rutina habitual con normalidad. 

La cantidad y duración de la sesión depende de la zona a tratar, su extensión, patología, tipo de radiofrecuencia empleada y su potencia. Claro está que a menor extensión de tejido, menos será el tiempo de aplicación y viceversa. 

Es importante que el paciente sepa que el estado de su piel, su edad, características personales, genética, problema a tratar y otros factores, determinan en qué medida la piel va a responder al tratamiento, la cantidad de sesiones que puede necesitar y el resto de tratamientos que harán falta para conseguir el efecto buscado. 

Como regla general, se estima que entre 6 a 10 sesiones son suficientes (una a la semana), pero este número es ampliamente variable según el caso. 

Una vez culminado el tratamiento se necesitan sesiones de mantenimiento; al principio una cada 15 días y posteriormente espaciadas cada 30. 

Tratamiento con Radiofrecuencia 

Desde la primera sesión, se observa una piel más compacta y luminosa. Las arrugas se difuminan y se produce una regeneración de los  tejidos. El óvalo facial queda redefinido y las bolsas y arrugas, atenuadas. Además del efecto ‘antiage’, la secreción sebácea de la piel también se regula, con lo que es una buena opción para pieles grasas o acneicas. 

¿Para quién es recomendada? 

Está indicada para pacientes de cualquier edad. En  pieles jóvenes, ayuda a mejorar sus problemas de acné, mientras que en pieles un poco más maduras, puede prevenir el envejecimiento o reparar sus signos. 

¿Número de sesiones necesarias? 

El número de sesiones oscila entre 8 y 10, depende tanto del paciente como de la zona a tratar, así como del tipo de radiofrecuencia. Desde la primera sesión se pueden ver los resultados. Según el tipo de radiofrecuencia habrá que espaciar más o menos las sesiones. 

En María Linda somos expertos en estilizar tu belleza y resaltar lo mejor de ti, por ello en cada una de nuestras sucursales, nuestros dermatólogos podrán hacerte un diagnóstico y recomendarte el tratamiento que más se adecue a resaltar tu belleza.